La nueva “vuelta al cole” en los centros de enseñanza de Castro Urdiales
- Coral Manteca
- 22 sept 2020
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 9 dic 2020
Los centros públicos y particulares retoman las clases adaptándose al Protocolo de Seguridad por el COVID-19
Colegios, institutos y academias de Castro Urdiales han abierto de nuevo sus puertas a alumnos y profesores la semana del 7 de septiembre a pesar de ser, según el Diario de Cantabria, el segundo municipio después de Santoña, con más casos positivos.
El Plan de Contingencia establecido en el Instituto Ataúlfo Argenta abarca el mantener la distancia de seguridad de 1,5 m o la obligatoriedad de mascarilla en todo el centro, Sin embargo, la profesora de latín, María Jesús Calavia, cree que el inicio de curso ha sido complejo por la cantidad de normas y protocolos que hay que asimilar. “Al final se hará más llevadero y se asumirá mejor si todos ponemos de nuestra parte”, opina. Igualmente, las academias extraescolares han tenido que enfrentarse a un comienzo escolar más particular. El propietario de la academia St. Mary´s Juan Antonio Cadenas Cueto y la profesora de inglés Paula Cadenas coinciden en que su comienzo ha sido intenso a la hora de mantener informadas a las familias de qué medidas iban a tomarse, aunque “los alumnos ya habían interiorizado mejor las normas, ya que los colegios e institutos iniciaron las clases antes y les informaron de ellas”, menciona él.
Cantabria se ha decantado por la enseñanza presencial 100% en sus centros públicos. No obstante, el Protocolo General para la Organización de la Actividad Educativa no ha sido apoyado por el sindicato ANPE, quien ve necesario fortalecer las medidas de una educación online por posibles confinamientos. Por su parte, las academias particulares como St. Mary´s han preferido llevar a cabo su enseñanza de manera online y presencial simultáneamente. Sin embargo, los gastos que este tipo de enseñanza corren a cargo de los propietarios de los centros. “Al principio del confinamiento se tuvo que invertir en un programa y aparatos electrónicos que permitiera conectarse online con los alumnos, que aunque existen programas gratuitos, la mayoría no están preparados para reuniones largas”, resalta Paula Cadenas.
En el caso de los centros públicos, aunque los recursos son mayores que los de una academia particular, estos también son escasos. El número de alumnos dificulta el poder dar una clase eficaz a todos ellos. La profesora de latín, tras más de 30 años de experiencia educativa asegura que es inviable poder atender en igualdad de condiciones a adolescentes de manera online y presencial simultáneamente, en cambio en una academia al ser más flexible, sería más factible realizarlo. “Para poder realizar una enseñanza eficiente y favorecer las necesidades de todos los alumnos simultánea serían necesarios dos profesores mínimo por clase”, concluye Calavia.

Comments